Hallan tesoro perdido de la familia imperial Habsburgo en la caja de seguridad de un banco en Canadá
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Entre las piezas halladas en Canadá se encuentra el legendario diamante amarillo, El Florentino, y la corona de diamantes de la emperatriz Sissi.

Hace más de 100 años desapareció un tesoro de la familia imperial Habsburgo, pero recientemente fue encontrado en una caja de seguridad de un banco en Canadá. Entre las joyas destaca El Florentino, un diamante amarillo de 137 quilates, considerado uno de los más grandes del mundo en aquella época.
Este sorprendente hallazgo fue confirmado por Carlos de Habsburgo, nieto del último emperador de Austria, al semanario alemán Der Spiegel. Según explicó, se enteró de la existencia del tesoro apenas hace un año, cuando dos de sus primos le informaron sobre la caja. Las joyas fueron trasladadas en 1918 por orden del emperador Carlos I.

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Hallan tesoro perdido de la familia imperial Habsburgo en Canadá
La historia del tesoro perdido comenzó en noviembre de 1918. El emperador Carlos I ordenó trasladar las joyas desde la cámara del tesoro del Palacio Imperial de Viena hacia Suiza. En 1921, el rastro se perdió por completo. Circularon rumores: algunos creían que fue robado, otros, que la familia lo vendió.
Más de un siglo después, Der Spiegel tuvo acceso a fotografías recientes de las piezas. Un informe pericial del joyero vienés Christoph Köchert confirmó su autenticidad. Según Carlos de Habsburgo, la emperatriz Zita, viuda de Carlos I, llevó las joyas a Canadá en una maleta marrón. El escondite estaría en Quebec, donde Canadá acogió a Zita tras su huida de Europa en 1940.
¿Qué tesoro hallaron en Canadá?
Entre las piezas halladas se encuentra el legendario diamante amarillo El Florentino, del tamaño de una nuez. Con 137 quilates, fue considerado el cuarto diamante más grande del mundo.
También figuran la corona de diamantes de la emperatriz Sissi, un reloj de esmeraldas que María Teresa regaló a María Antonieta y otros objetos de gran valor histórico.
Aunque gran parte del tesoro fue recuperada, aún faltan muchas joyas, incluidas algunas que estaban en la cámara del tesoro en 1918. Su paradero sigue siendo un misterio.
